Las ideas rebotan en mi cabeza. Llueve. Suena un trueno. A lo lejos se ve un relámpago. Mi apartamento es un completo desorden. Un caos. Dos obreros trabajan perezosamente. Llevan veinte días intentando encontrar una fuga de agua. No sé si lo mío es paciencia, resignación o estoicismo. Estoy atrapado en mi propia habitación. Es[…..]