Había una vez un mundo donde las canciones duraban tres minutos, tenían estribillo pegadizo y seguían las reglas sagradas de la radiofonía comercial. Era 1975, y en ese ecosistema musical dominado por el glam rock y el incipiente punk, la idea de grabar una «ópera de burla» de casi seis minutos sin un coro convencional
Hay algo inquietante en ver un objeto volando sin piloto. No es solo la novedad tecnológica —esa ya pasó de moda hace rato— sino esa sensación primitiva de que algo anda mal con el orden natural de las cosas. Los pájaros vuelan porque nacieron para eso. Los aviones vuelan porque hay alguien adentro que sabe[…..]
Hay algo profundamente colombiano en la historia de Hernán Peláez Restrepo,y no es solo el fútbol. Es esa capacidad nuestra de reinventarnos cuando la vida nos pega la patada más dura, de encontrar en los rincones más inesperados la vocación que nos marca para siempre. Porque este caleño que hoy conocemos como «el doctor» de[…..]






