En la travesía de la vida, las relaciones humanas se entrelazan como hilos en un tapiz, creando patrones únicos y significativos. Cada encuentro, cada vínculo, es una oportunidad para explorar nuestra propia humanidad y crecer en conjunto. La capacidad de conectar profundamente con otro ser humano requiere valentía y autenticidad. Es en la vulnerabilidad donde
El amor siempre termina siendo una circunstancia, que a veces termina convertida en distopía, porque generalmente llega a nuestra puerta sin llamarlo para cambiarnos la existencia, no sin antes revolcarnos. Y es que el amor es una cosa y las relaciones de pareja, otra. El amor depende de uno y hace parte de nuestro libre[…..]
No nos digamos mentiras. En condiciones normales y a riesgo de generalizar, las mujeres no pedimos perdón. No estamos hechas para eso. Hay algo en nuestro ADN, que nos impide reconocer nuestros errores. Y no es que nos equivoquemos menos. No. Tampoco que seamos infalibles, ni que nos las sepamos todas. Lo que sucede es[…..]
La vida es una pared. Todo lo que damos se nos devuelve tarde que temprano. Lo bueno y lo malo. Y es que todos tenemos una idea de la forma en que el universo se organiza. Unos creen en Dios, otros en el destino, otros en la energía y otros no creen en nada. Y[…..]
Si hay amor nunca será tarde y por eso habrá que intentarlo las veces que sea necesario, porque el amor es de valientes, de personas que un día se atrevieron a superar el miedo, la rabia, la culpa y lo ansiaron nuevamente. Si amando uno no es capaz de intentarlo, se merece todo lo malo[…..]
Muchos atardescentes tenemos hijos , sobrinos, nietos o algún familiar millennial, es decir seres humanos nacidos entre 1985 y el año 2000 y aunque la historia de la humanidad es la historia de las tensiones entre los padres y los hijos, ésta en particular suele ser muy especial. En el mundo de hoy, es más[…..]
Los seres humanos desarrollamos la absurda idea que los demás son nuestros. Creemos que nos pertenecen como un muñeco de felpa, una cosa, un ente inanimado, un cuerpo sin sustancia. Y se lo aplicamos por igual a los amigos, a los hijos o a las parejas. Y así nos va. Esa posesión imaginaria nos[…..]
La gran tragedia de los seres humanos es intentar tener siempre la razón, porque no es lo mismo la convicción que la obsesión. Nos hacemos a la idea que estamos en lo cierto y cerramos la posibilidad de ver otras respuestas, otras miradas. Tercos, testarudos, tozudos y obstinados, creemos tener el argumento suficiente para entender[…..]
Dice que la historia que el maniqueísmo es el nombre que recibe la religión fundada por el sabio persa Mani, quien decía ser el último de los profetas enviados por Dios a la humanidad, siguiendo a Zoroastro, Buda y Jesús. Se caracteriza por creer en la existencia de dos principios contrarios y eternos que[…..]
Los que tenemos hijos, sabemos que siempre tenemos y tendremos, una forma distinta de ver las cosas, un doble rasero, cuando se trata de ellos. Frente a los demás, podemos decir y hacer lo que nos venga en gana, pero a la hora de juzgar lo que ellos hacen o dicen, generalmente tenemos una vara[…..]