Mi biblioteca, no será Alejandría, pero es mía. La he ido construyendo con los años. Comprando poco, recibiendo mucho y olvidando devolver otro tanto. Casi, casi un Robin Book. Tengo consentidos. Obvio. Los de Galeano, los de Benedetti, los de Gabo, La alegría de querer, Opio en las nubes, el I Ching , los de
Amo los horóscopos como amo a Sabines, a Galeano, a Fontanarrosa, a Piedad Bonnet y a Benedetti y por eso, no hay semana que no los lea. En ellos siempre he encontrado un pequeño refugio, una isla en este mar de podredumbre que a veces nos consume. Y es que un horóscopo que no[…..]





