Todos los presidentes, en cualquier parte y en cualquier tiempo, suelen creer, en su infinita vanidad, en su inmodestia desbordada, que están ahí para mandar, para resolver, para disponer, para orientar. Líderes, se alcanzan a llamar. Pobrecitos. Que alguien les diga que no, que venga que no es pa`eso, que parcerito abra bien los ojos, […]
A mí se me aplica la teoría del novio que se quiere ir: no eres tú, soy yo. En el tema espiritual, soy creyente consumado, pero en el tema político, soy ateo radical. La política me da asco, me produce náuseas, me causa malestar, me alborota la migraña y me genera arcadas. Algo así[…..]
Estamos llenos de gente con buenas ideas, pero con malas intenciones, porque a la hora de proponer, todos tienen doctrinas ingeniosas, frases rimbombantes, salidas avispadas, soluciones asombrosas, pero en el momento de mostrar los resultados, nos hacen pistola con los dedos de las manos y los pies, porque lo único que les interesa es el[…..]