El síndrome de Hubris

La gran tragedia de los seres humanos es intentar tener siempre la razón, porque no es lo mismo la convicción que la obsesión. Nos hacemos a la idea que  estamos en lo cierto y cerramos la posibilidad de ver otras respuestas, otras miradas. Tercos, testarudos, tozudos y obstinados, creemos tener el argumento suficiente para entender

¿Desayuno o comida?

En una sociedad falocéntrica como la nuestra, vivimos más pendientes de con quién nos vamos a acostar que con quién nos vamos a levantar. Aunque somos pacatos y tapados, a los hombres y mujeres, a los blancos y los negros, a los pobres y los ricos, a los adolescentes y también a los atardescentes, nos[…..]

Volver a la niñez

Los grandes dolores nacen de la tendencia que tenemos todos los humanos de crear expectativas con respecto a las personas, a la vida, al futuro. Nos olvidamos de pequeños detalles que nos conducen a los daños y a los padecimientos: el libre albedrío de los demás ( que básicamente consiste en la posibilidad de hacer[…..]

Las deudas del pasado

El dolor en los seres humanos merece respeto, paciencia, cuidado y sobre todo, tiempo. No admite juicios de valor, ni burla, ni desprecio, ni sarcasmo.   Tratar de entender el dolor de los demás es un proyecto fracasado, porque siempre y de alguna forma terminamos por juzgar. ¿Y por qué llora?¿ Por qué sufre? No[…..]